Dice Consuelo Lizárraga:
Invitándoles a unirnos a la cadena de oración en cada mediodía, a las 12, por la paz, amor y prosperidad de la humanidad.
Al rezar, el hombre habla y Dios escucha; al meditar, Dios habla y el hombre escucha.
¡Feliz mayo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario